#CuscoDatos. El juicio oral contra el exalcalde del distrito de San Sebastián, Jorge Acurio Tito, y otros implicados por los presuntos delitos de colusión, peculado doloso y falsedad ideológica en la compra de 54,500 bolsas de cemento en el 2009, avanza con lentitud en el Cuarto Juzgado Penal Unipersonal Supraprovincial Especializado en Delitos de Corrupción de Funcionarios de Cusco, a cargo del juez Jimmy Manchego.
TESTIGO AUSENTE Y REVELACIONES CONTABLES
En la última audiencia, realizada el 11 de julio de 2025 y transmitida en vivo por el Facebook de la Corte Superior de Justicia del Cusco, se esperaba la declaración del testigo Lizargo Luna, quien no se presentó. Ante esto, el juez ordenó su conducción compulsiva para la próxima sesión.
Mientras tanto, declaró Celia Conza, quien fue asistente de contabilidad de la empresa "URPI", proveedora del cemento. Conza reveló que las bolsas se registraron como "ventas diferidas" en el sistema contable, ya que no había totalidad del stok del cemento.
Si el testigo (Lizardo Luna), no comparece en la próxima audiencia, se procederá con la lectura de documentos vinculados al imputado Acurio, exautoridad que también fue presidente regional de Cusco.
UN CASO DE CORRUPCIÓN QUE CUMPLE 16 AÑOS
El escándalo estalló en 2009, cuando la entonces procuradora anticorrupción Dora Monzón Valverde inspeccionó los almacenes municipales y descubrió que las 54,020 bolsas de cemento, adquiridas por más de 1.3 millones de soles, no fueron halladas. Monzón denunció a Acurio y a empresarios por falsificar declaraciones de conformidad para cobrar el pago sin entregar el material en su totalidad.
El juez Manchego enfrenta el desafío de cerrar un caso emblemático de presunta corrupción local, en medio de un sistema judicial peruano frecuentemente cuestionado por la impunidad.